Mensaje Lunes 4 de Mayo.
9:34
Estimados Padres de Familia
El día de hoy queremos compartirles algunas sugerencias para
hacer frente a las emociones negativas que pudieran estarse presentando en cada
uno de los miembros de familia debido a tantos días en
los que se ha vivido dentro de casa para la mayoría de
las familias.
Es importante reconocer que a
nivel biológico-anímico las sensaciones de cansancio,
aburrimiento, hartazgo y molestia, entre otras, son normales que aparezcan.
Normalmente ante un ambiente inesperado, la persona genera un estado de alerta
y movimiento que en las primeras semanas ayudó mucho
a las familias para ser flexibles y proactivas para solucionar las entregas de
tareas, trabajos y actividades en casa. Sin embargo, al pasar los días, el mismo cerebro de las personas
se acostumbra a esta nueva situación y ya
no genera por sí solo la respuesta de alerta
que en un primer momento se tuvo, al contrario, genera una sensación de rutina y enfado.
a a) Ante
esta sensación es importante reconocer y
hacer conciencia de estas emociones, aceptarlas y repetir constantemente en
palabras mentales, el por qué se
genera este estado.
b b) Enseñar a sus hijos y a sí mismos que esta situación es una excepción a la vida cotidiana y a la cual, es
posible hacerle frente aunque no siempre saldrá de la
manera perfecta en la que nosotros desearíamos.
c
c) Este
periodo de cuarenta es una gran oportunidad para enseñarle a los niños que
la desgana es común en los periodos de la vida
y que pese a esa sensación es
posible seguir cumpliendo objetivos aunque para ello se requiera esfuerzo (un
esfuerzo que quizá no se estaba acostumbrado a
practicar).
d d) Ser
compasivos ante los fallos y la desgana. En estos momentos de incertidumbre, es
normal fallar o no alcanzar a hacer todo lo que se quiere o planea realizar, si
esto sucede, se sugiere adquirir una actitud de compasión hacia sí mismo
y de análisis para diferenciar entre
lo que está en mi capacidad para
resolver y lo que excede. Buscar estrategias para resolver lo que sí está mi
poder y soltar lo que no se puede.
e e) Buscar
personas que puedan apoyarles emocionalmente y en caso de posibilidad ser esa
persona a la cual puedan acudir otros para desahogarse y recibir un consejo
formativo para su bienestar.
Es necesario hacer incapié en la constancia de tener un horario
con horas fijas de levanto, sueño,
comidas, tarea y actividad física.
Esto ayudará a generar en lo posible un
ambiente de estabilidad tanto para el adulto como para el niño.
Así mismo,
recordales que el departamento psicopedagógico
está en disposición de escucharles y apoyarles en lo que su alcance sea
posible. Pueden comunicarse al correo
para solicitar alguna videollamada o enviar un
mail para resolver dudas.
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